Es. Él. Mar.
Inunda y está salado. Y cómo me gusta el mar. Cómo me gustó.
Tan grande y misterioso. Nada como el mar para esconderse.
Profundo.
Él también se agacha. Agachadito está dentro de ti. ¿Lo
hueles? Como el puerto. Y la marea, cuando está baja de moral. Como las algas
cuando hacen fuerza.
Como, como y como,
y sin embargo mantengo el vacío. ¿Cómo
como con esta oquedad? Agachadito está dentro de ti. Y no sé por qué, ni donde, si no
había vacío, no había espacio, lo juro. Eres (tan (grande (y misterioso))).